El mandatario Guillermo Lasso responsabilizó del ataque a los miembros del "crimen organizado", a quienes advirtió que "les va a caer todo el peso de la ley".
Candidato de los movimientos de centro Construye y Gente Buena, y que había denunciado a principios de agosto amenazas contra él y su equipo de campaña, Villavicencio murió al ser baleado cuando abandonaba un polideportivo en el norte de la capital después de encabezar un mitin de campaña.
Villavicencio era uno de los ocho candidatos presidenciales para las elecciones generales anticipadas del 20 de agosto.
La Fiscalía informó que en el atentado se registró también "9 heridos, entre ellos una candidata a asambleísta y dos policías", además de la muerte de uno de los presuntos criminales, abatido por el personal de seguridad en un cruce de balas.
Luego reportó que seis personas fueron detenidas en allanamientos ejecutados en un barrio del sur de Quito y en un vecino poblado, y que el cuerpo del político se encontraba en el departamento policial de Medicina Legal para ser sometido a una autopsia.
El médico Carlos Figueroa, amigo de la víctima y que le acompañaba en el momento del atentado, manifestó a la prensa que los atacantes realizaron alrededor de 30 disparos.
"Lo emboscaron en la parte externa" del polideportivo, recordó. "Algunos (de los presentes) hasta creyeron que eran fuegos pirotécnicos".
El diario El Universo, el principal del país, señaló que Villavicencio fue asesinado "al estilo sicariato y con tres tiros en la cabeza".
La policía detonó un artefacto explosivo colocado en el sitio del atentado, dijo Alain Luna, director de investigaciones de la Policía.
"Nos horroriza"
"Indignado y consternado por el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio. Mi solidaridad y mis condolencias con su esposa y sus hijas", expresó Lasso a través de la red social X, antes Twitter.
"Por su memoria y por su lucha, les aseguro que este crimen no va a quedar impune (…) el crimen organizado ha llegado muy lejos", advirtió el presidente de Ecuador, país que sufre en los últimos años un embate del crimen vinculado al narcotráfico.
La tasa de homicidios se duplicó entre 2021 y 2022, cuando se registraron 25 homicidios por cada 100.000 habitantes.
Periodista y exmiembro de la Asamblea Nacional disuelta por Lasso en mayo, cuando anunció el adelanto electoral, aparecía segundo en la intención de voto con 13,2%, detrás de la abogada Luisa González (26,6%), única mujer en liza y afín al exmandatario socialista Rafael Correa (2007-2017), según la más reciente encuesta de Cedatos.
Países y organismos como Estados Unidos, España, Chile y la misión de observadores de la OEA condenaron por separado el crimen, que fue tildado de "detestable" y "salvaje".
"Nos horroriza el ataque trágico (…) La violencia no puede ganar. La democracia sí", declaró el embajador de la Unión Europea (UE), Charles-Michel Geurts, por X.
"Jamás permitiremos que este tipo de actos queden en la impunidad. Cuando tocan a uno, tocan a todos. Cuando está en riesgo la vida de uno, está en riesgo la de todos", expresó González por la misma red social.
– "Fuerte golpe" a la democracia –
González y otros candidatos presidenciales como Yaku Pérez (líder indígena de izquierda, tercero con 12,5%), Otto Sonnenholzner (exvice de derecha, cuarto con 7,5%) y Jan Topic (derechista, sexto con 4,4%) anunciaron la suspensión de sus campañas y deploraron el asesinato, de acuerdo con medios.
El constitucionalista Ismael Quintana sostuvo que el crimen no debe suspender los comicios, de acuerdo a la ley electoral.
"La muerte de un candidato NO constituye causa de suspensión o aplazamiento de la elección. Corresponde que la organización política lo reemplace por otro candidato, a quien se le imputarán los votos del fallecido, en caso que las papeletas estén impresas", refirió por esa misma red.
Lasso convocó de urgencia a la sede presidencial al gabinete de Seguridad, así como a los titulares de organismos estatales como la máxima Corte Nacional de Justicia (CNJ) para "tratar este hecho que ha consternado al país". La reunión se extendía pasada la medianoche (00H00 GMT del jueves).
"Este acto criminal es un fuerte golpe a la institucionalidad y la democracia ecuatoriana, no solo que hay un pueblo consternado sino con profundo temor de que se atente con la vida e integridad de las familias ecuatorianas", expresó la CNJ en un comunicado.
Hace una semana, Villavicencio -acérrimo opositor al correísmo- denunció amenazas contra él y su equipo de campaña supuestamente provenientes del líder de una banda criminal ligada al narcotráfico.
"Pese a las nuevas amenazas, seguiremos luchando por la gente valiente de nuestro #Ecuador", escribió entonces el político por X.
Citó que recibió una "gravísima amenaza" de "alias Fito", quien está detenido y encabeza la organización "Los Choneros".
Como periodista, Villavicencio destapó un esquema de corrupción en el que estaba participaba el expresidente Rafael Correa (2007-2017), condenado a ocho de prisión por ese caso.
Después ejerció como presidente de la comisión legislativa de Fiscalización, donde continuó denunciando casos de corrupción.
La violencia en pleno proceso electoral también deja el asesinato de un alcalde y un candidato a diputado.
Antes de los comicios locales celebrados en febrero en Ecuador dos candidatos a alcaldías fueron asesinados.
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