Este trabajo tiene una
única finalidad y es detener el deterioro, la inestabilidad y la pérdida gradual de las estructuras de este monumento,
causados por el paso del tiempo, los desastres naturales que han impactado la
isla y el desuso.
Esta obra consiste en la
construcción de una estructura temporal de madera para aportar estabilidad y
firmeza al monumento, empleando madera tratada de alta resistencia y
durabilidad, la cual sostendrá por dentro y por fuera sus debilitados muros,
contrafuertes y bóvedas, protegiéndolos de posibles derrumbes que pudieran
provocar fenómenos atmosféricos y telúricos.
La tecnología
constructiva se completará agregando placas de acero para las uniones de
las piezas de madera, más la aplicación de barras de carbono como pasantes
y refuerzo. También abarcará labores de conservación de los muros, juntas y los
techos para detener la degradación de esta edificación, que se encuentra en la
Ciudad Colonial de Santo Domingo.
La obra no contempla
asignar uso alguno a este monumento, ya que será responsabilidad de la sociedad
dominicana determinar el futuro uso que habrá de tener esta edificación
patrimonial.
Estudio previo
Constancia de su estado,
se evidencia en el Análisis de la Integridad Estructural de las Ruinas del
Monasterio San Francisco, realizado por un equipo de conservadores encabezados
por la
experta francesa, Laure Marieu, entregado en enero de 2020 a República
Dominicana, a través de los ministerios de Turismo y de Cultura y del Banco
Interamericano de Desarrollo (BID). (Revisarlo en este enlace: https://publuu.com/flip-book/207525/499336/page/1)
Dicho estudio muestra la
vulnerabilidad de este monumento, ante los desastres naturales, terremotos y
ciclones tropicales.
Integración de la
comunidad
Cumpliendo con las normas
del Programa de Revitalización de Ciudad Colonial, desde el año 2021, la
comunidad periférica al Convento de San Francisco y del Centro Histórico ha
sido consultada y puesta en conocimiento de su estado de fragilidad y de las
obras de protección que se ejecutarán, por lo cual se han realizado dos
consultas públicas (con residentes de la periferia y con comerciantes del
entorno, ambas en agosto de 2021) y se han celebrado cuatro Espacios
Comunitarios de Consulta y Participación (ECOP), donde además de residentes y
comerciantes han intervenido artistas, lideres comunitarios, religiosos y representantes
de las juntas de vecinos que inciden en el área, (realizados en marzo, junio y agosto
de 2022 y julio de 2023).
El proyecto también fue consensuado
con la Sociedad Dominicana de Sismología e Ingeniería Sísmica (Sodosísmica).
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